Parece que las temperaturas empiezan a darnos un respiro apeteciéndonos un buen guiso con el que llevar deliciosamente la transición al otoño. ¿Y qué mejor que darle a la cuchara con una olla de cerdo?. Un plato con años de tradición en los hogares de la Región y que gracias a la #GastropediaRM podéis emplatar en vuestra mesa y mantel. Contundencia al servicio de los #1001SaboresRM.
Como siempre, vuestro carnicero de turno os preparará una mise en place con la que haceros aún más fácil disfrutar de la receta de hoy. Pedidle que las manitas de puerco las corte longitudinalmente para una mejor cocción. Seguid académicamente el orden que os mostramos en el vídeo puesto que cada ingrediente necesita su tempo. Y experimentad. En lugar de colorante alimenticio, tened unas hebras de azafrán en medio vasito de agua una hora antes de añadirlo a la olla o, por qué no, sustituirlo también por cúrcuma para darle un brillo aún más intenso.
A estas alturas de recetario no tenemos que recordaros que tanto el pimentón como el arroz deben ser de nuestras Denominaciones de Origen Protegidas. Vuestro paladar lo agradecerá. Si utilizáis habichuelas frescas deberéis tenerlas a remojo desde la noche anterior y echarlas al inicio junto con los ingredientes que os mostramos. De otro modo os quedarán impracticables en boca. Las morcillas lo último para no desmenuzarlas en demasía.
Y jugad en vuestra cocina al gusto. Hay quien utiliza garbanzos, morro de cerdo o incluso una ramita de canela. ¡Eso es lo bonito del sabroso arte de los fogones! Mary Luz Piñero nos propone otra variedad en su web con sofrito previo. Un plato al que ni siquiera Karlos Arguiñano puede resistirse.
¿Preparados para entrar en calor? ¡Chup, chup, oink! ¡Dentro vídeo!
Dificultad: disponer de una marmita de druida.