Cuando el cielo anda algo triste, y como manda la costumbre en Murcia, es tiempo de migas. No tengáis miedo y haceos con todos los ingredientes porque, con la #GastropediaRM de hoy, veréis que eso de que se tarda horas en prepararlas es un mito.

Lo primero que debéis tener lista es una buena sartén antiadherente. No os aventuréis a rular si vuestros utensilios de cocina andan oxidados y desactualizados. Una maravillosa receta puede convertirse en una pesadilla.

En ella calentaremos AOVE e iremos friendo los distintos ingredientes por riguroso orden con el fin de que todos ellos vayan soltando su particular toque para el sabor final. Ojo con pasaros con la cantidad de aceite utilizada. Tened en cuenta que la carne soltará grasa y no queremos que las migas salgan aceitosas. Empezaremos con los ajos tiernos. Prácticamente vuelta y vuelta pues estarán listos en segundos. Los dientes de ajo pueden estar más tiempo pero con la ñora debéis llevar el mismo cuidado si no queréis saborear un excesivo amargor al final. Iremos retirando todos cuando estén listos para dar paso a la chicha. En este caso hemos optado por salchicha, longaniza y tocino (panceta para muchos). Debe quedar todo bien dorado. Si sois de los que pensáis que unas migas sin morcilla no son migas, freid éstas en una sartén a parte puesto que corréis el riesgo de "ensuciar" la receta.

Recordad tener preparada con anterioridad la misma cantidad de agua que de harina (de fuerza, no cualquiera). Insistimos, idéntica. Como si de maestros pasteleros se tratara, debéis pesar al milímetro ambas para no correr el riesgo de estar mucho más tiempo dándole al brazo y rasera. Si no queréis comprarla a granel en cualquier superficie, preguntad a vuestro panadero pues, posiblemente, la venda al peso. Solo con pedirle "harina para migas" sabrá qué daros.

Sobre ese aceite bien condimentado echaremos el agua y, cuando veáis que burbujea, añadid la harina bien repartida por la sartén y ¡hala! A darle. Veréis que, siguiendo nuestros consejos, las tendréis listas en muy pocos minutos. Una vez sueltas al gusto (más grandes o pequeñas) añadid todos los ingredientes antes retirados para darle más untuosidad.

El acompañamiento de las migas varía en función de cocineros y plazas. Probad a rematarlas con un huevo frito. Imposible no salivar. O con uvas, boquerones fritos, pimientos de Padrón, piparras fritas, cebolla encurtida o incluso con chocolate. ¿Con qué os gustan más? Mandadnos vuestras propuestas de esta maravilla de nuestro patrimonio culinario.

Ya no hay excusa para disfrutar de uno de los clásicos de los #1001SaboresRM. A darle a la rasera y paladar. Es tiempo de cocinar.

Dificultad: tener actualizado el menaje de cocina.

¡Dentro vídeo!