Recibamos a uno de los productos más versátiles de los 1001 Sabores, el conejo. Con una alta carga proteínica y una mínima cantidad de grasa, este maravilloso producto puede prepararse de muchas maneras. Ni os contamos de fósforo, selenio, potasio y unas cuantas vitaminas más que os echaréis al cuerpo.
Hoy, frito con tomate, otra de esas exitosas recetas con las que siempre hay que contar en vuestro cuaderno de notas gastronómico, ese que atesoráis en un cajón de la cocina.
Siempre está bien pasar tiempo al aire libre, por lo que este clásico de nuestra tierra se presenta perfecto para esas jornadas que pasamos bajo la sombra de cualquier árbol o sombrilla.
Cada hogar tiene su truco, pero la base siempre es la misma. Eso sí, tomate natural, por favor.
Cortad la cebolla y el ajo en una brunoise muy fina para sofreír, vigilando que no se queme este matrimonio indisoluble de la cocina española. Un gastrotruqui: meter ambos junto al tomate en una batidora, pasar por el chino, y sofreírlo todo bien triturado y colado. Ahorraréis tiempo y la textura será mucho más fina. Añadid unas hojas de laurel y romero fresco mientras termináis de evaporar el agua del tomate. Un poquito de azúcar para evitar acidez incómoda y, si sois valientes, una pizca de comino para elevar el resultado a tonos más sabrosos.
Nada como una receta para jugar con ella. El pimiento rojo siempre podéis combinarlo o cambiarlo por verde italiano, quedando un pisto perfecto para la carne. Los pimientos de Padrón o los de bola son una buena opción para darle un toque original y sorpresivo. Incluso hay quien tritura el hígado y lo incluye en el sofrito para darle aún más empaque.
El conejo, como siempre os decimos, que quede bien doradito, con color. Y ¿por qué no añadirle alguna especia moruna o un toque de rabioso picante?
Para rematarlo y emplatarlo regiamente, coronar con unos huevos fritos. ¿Quién dijo miedo? Picad muy finamente un poco de perejil y cebollino fresco para darle esa última y apetitosa pincelada de color.
¡Y pan murciano a hartura y vino con mesura!
Solo os queda disfrutar con la #GastropediaRM, como siempre.
Dificultad: que no es vendan gato por liebre.
¡Dentro vídeo!