La Región de Murcia sigue acumulando reconocimientos por su gastronomía y sus restaurantes.
El acto, celebrado el día 11 de noviembre en Córdoba, ha consistido en la "coronación" por parte de la guía gastronómica Repsol a los locales más castizos y los bares con solera del ámbito nacional, otorgando así sus "Soletes con Solera".
Con estas distinciones, se trata de premiar a "lo de siempre", lo tradicional, a los que se han mantenido fieles a sus sabores tras varias generaciones. Por lo que, tras estos nuevos 300 premiados, el listado se salda con un total de 4.400 sellos amarillos en toda España.
Pero, ¿quiénes han sido los nuevos premiados en nuestra Región?
¡Te lo contamos!
Fundado en 1880, manteniéndose verdaderamente fiel a los sabores en los que se reconocen sus cinco generaciones y sumando experiencias mientras que las recetas de sus cocinas se mantienen intactas, encontramos Bodegón Isi en Caravaca de la Cruz. Todo aquel que haya ido te dirá lo mismo: buena comida, buenas personas y buenos precios.
Una taberna tradicional considerada todo un clásico del centro de Murcia es Pepico del Tío Ginés. Ha resistido el paso del tiempo y ha pasado de generación en generación, siendo esta su tercera, con sus mismas tapas y platos típicos.
Las cafeterías y pastelerías también tienen cabida en estos premios, por tener "el horno que mejor hace el dulce típico de la zona". Mi abuela, fan incondicional de la tradición gastronómica murciana, ya lo decía desde hace años: el pastel de la cierva de La Peladilla es único, y es así como han logrado tras largos años de tradición su "Solete con Solera".
En La Tasca de Noah, un restaurante con arraigo ubicado en Calasparra, sus propietarios Fulgencia y Juan, brindan con tacto y maestría un servicio culinario tanto tradicional como introduciendo recetas "reinventadas". En este lugar, no podía faltar el arroz DOP de Calasparra, un orgullo local que aquí se prepara con esmero, demostrando su calidad en cada plato de arroz que sirven.
Los "Soletes con Solera" reconocen el esfuerzo de familias que han mantenido vivo su oficio entre generaciones. El Ventorrillo de Tío Benito (Alhama de Murcia) está a día de hoy regentado por los sobrinos del propio Benito. Este lugar pintoresco y lleno de encanto te transporta directamente a los años 80. Desde que cruzas la puerta, te envuelve el aroma de pan recién horneado que llevan
haciendo desde hace más de 100 años en su mítico horno de leña. De igual manera ocurre con su embutido casero, el cual es imprescindible probar si echas una visita allí.
Y nuestra última parada, Cehegín. La barra de El Sol podría contar mil historias. Con sus inicios en 1943 y tras pasar por cambio de nombre y relevo generacional, este restaurante con solera ha sabido dar con el perfecto equilibrio entre las recetas heredadas y la nueva cocina. Por lo que, no es de extrañar que cuente con más de mil reseñas y una puntuación muy elevada.
Con estas nuevas incorporaciones, la Comunidad alcanza un total de 85 Soletes, un reconocimiento que no solo celebra la buena mesa, sino también el alma y la historia que cada uno de estos lugares aporta a la identidad gastronómica de la Región de Murcia.
Si algo sacamos en claro tras este listado es que, los "Soletes con Solera" nos recuerdan cómo, en un mundo en constante cambio, la autenticidad y el respeto por las tradiciones siguen siendo valores fundamentales.
Estos locales han encontrado un lugar especial y, con cada plato, conservan y transmiten el sabor de su herencia. Gracias a ellos, la tradición permanece viva, marcando el camino e inspirando tanto a las grandes ciudades como a los nuevos emprendedores que buscan capturar esa esencia en sus propios negocios.